lunes, 2 de julio de 2012

Carta al Universo.

Fui concebida a temprana edad y desde entonces mi mamá se encargó de darme lo mejor, crecí sin papá pero eso ha sido el menor de mis problemas, he tenido una familia maravillosa y una abuela que no me puedo quejar de lo grandiosa que es. Mis tías son como mis hermanas y mis primos hasta hijos míos parecen, así somos en esta casa, UNIDOS.

He tenido dos perritas que también era parte de la familia y me escuchaban mejor que nadie, las extraño.

Pero yo no les vengo a hablar de mi infancia o mi familia, les vengo a poner una queja, a ustedes el publico masculino... ¿Qué carrizo les pasa? ¿Es que acaso una no tiene derecho a tener un amor como en orgullo y prejuicio? -o cualquier película cursi que se les ocurra-

Reconozco que nosotras las mujeres somos manipuladoras, pero cuando queremos a alguien, lo queremos con todo, intensas pero apasionadas... O por lo menos las mujeres como yo - y nadie se ha atrevido aprovechar mi buena voluntad, mis ganas de querer- .
¡TODO ES SEXO!
Parezco una doña del siglo pasado, soy de estos tiempos y al mismo tiempo no, no entiendo a los hombres y ellos no me entienden a mi, sus necesidades son distintas a las mías.
¡NADIE ESTÁ LIBRE DE PECADO!

Veo a tipos ejemplares saliendo con bichas y luego quejándose de que las mujeres esto o las mujeres aquello ¿pero no pensaron que así la quisiste y así la conociste?

Mi punto es que, me quejo del sistema de ahora y le reclamo al chico que me toca y anda por la vida perdido, por dejarme pasar estas odiseas.

"Lo contrario del amor no es odio, es la diferencia"

Te conté de mi familia para que entendieras lo reservada que puedo llegar a ser, haber crecido con cuatro mujeres enseña mucho - Apartando mis quejas un día, una gran amiga me dio un consejo: "trata de ser feliz" y mira que en estos tiempos es lo mejor que me pudieron decir.

Ya ves, tengo esperanzas en el mundo, pocas pero las tengo.


G. Mariño Gómez

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuenta tu inicio, como yo